Sinopsis: Nina, una joven de 20 años, estudiante de periodismo, debe vaciar la biblioteca de la casa de su abuelo. Entre las páginas de un libro de propaganda nazi encuentra ocho cartas dirigidas a él que la acercarán a un pasado desconocido. Su abuelo escapó del nazismo, pero nunca quiso hablar demasiado de eso... En ese silencio se entrama una historia dolorosa, enlazada entre amores y escapes de supervivencia. El hoy, el pasado, el inevitable sufrimiento y las pérdidas; el amor, las huidas y la suerte de un nombre prestado que tuerce el destino y permite que vida se imponga
Opinión: Este ejemplar llegó a mis manos debido a una colección de un diario que compré. Me enganché desde la primera página con este libro.
La historia es corta y simple, pero a la vez narra un tema tan trágico como es el nazismo. Me parece difícil de encarar, sobretodo de una manera tan amena como lo hace la autora. El libro está estructurado en 14 capítulos, cada uno titulado con el nombre de un personaje, saltándose entre el presente y el pasado. Tal vez esperaba más, y creo que es un argumento que permite mucho desarrollo. Es decir, me pareció muy corto, y quedé con ganas de seguir leyendo, de conocer más detalles de la historia.
Sobre los personajes no hay mucho para decir. Me quedé con ganas de conocerlos más, de saber más detalles de sus historias personales y de sus caracteres. El abuelo de Nina es un personaje que me gustó mucho.
La escritura es fluida. Me resultó muy rápido de leer, y la manera de narrar me pareció entretenida, pero no es sobresaliente. Una cosa que me molestó es la utilización de expresiones como “Es decir”. Me parece que se repite varias veces, y no creo que sea tan necesaria su utilización.
En resumen, es un libro recomendable para pasar un rato con una lectura ágil. No es sobresaliente, pero es un buen libro para las personas que desean empezar a adentrarse en el tema del nazismo.
Puntaje:
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